QUISTE MESENTÉRICO EN NIÑO
LA MIRADA CUIDADOSA DEL ECOGRAFISTA
Palabras clave:
QUISTE MESENTÉRICO, DIAGNÓSTICO, ECOGRAFÍAResumen
INTRODUCCIÓN: El quiste mesentérico es uno de los tumores abdominales más raros, con aproximadamente 820 casos reportados desde 1507. La ausencia de manifestaciones clínicas y signos radiológicos característicos puede presentar importantes dificultades diagnósticas. OBJETIVO: describir las manifestaciones clínicas en un paciente con un quiste mesentérico y la vía para el diagnóstico. REPORTE DE UN CASO: Paciente de sexo femenino de 2 años de edad, sin comorbilidades que se queja de dolor abdominal, principalmente en fosa ilíaca, asociado a vómitos intensos y picos febriles esporádicos desde hacía unos tres meses. Abdomen globoso e indoloro sin visceromegalias ni masas. La ecografía abdominal mostró una colección de paredes delgadas y contenido anecoico con un mínimo de detritos en suspensión en la región supravesical e hipogástrica. Pruebas de laboratorio con leucocitosis. La sintomatología intensificada se refirió a la tomografía de abdomen total, que mostró una lesión quística de gran tamaño, contorneada y bien definida, de aproximadamente 12 x 6 cm de localización intraperitoneal, ocupando la mitad inferior del abdomen. La lesión presentaba tabiques en su cara anterosuperior izquierda con efecto de masa sobre las estructuras adyacentes, con desplazamiento de asas intestinales, pero aparentemente con planos de clivaje y con líquido libre en pequeña cantidad en el fondo del saco peritoneal, sin agrandamiento ganglionar retroperitoneal ni pélvico y presencia de ascitis masiva. El paciente fue sometido a laparotomía exploradora diagnóstica, que mostró un quiste mesentérico gigante en la raíz del mesocolon, que fue extirpado. CONCLUSIÓN: El quiste mesentérico es la principal manifestación clínica del dolor abdominal asociado a los vómitos. Su diagnóstico es difícil de concluir y puede requerir una atención especial por parte de la ecografía. Si persiste la duda, deben indicarse pruebas de mayor precisión. El papel del ecografista va mucho más allá de la aplicación de la sistemática en la realización de las pruebas, necesita correlacionar las imágenes radiológicas con la asociación de posibles diagnósticos clínicos y aprovechar todas las hipótesis posibles para dilucidar y facilitar el diagnóstico final.